Michael Schumacher a los cuatro años cuando su padre, Rolf, le dejó conducir su primer kart. Le gustó tanto que su padre acabó construyendo para que Michael y su hermano Ralf, siguieran la profesión de correr Fórmula 1. La afición creció y, con 14 años, " Schumacher " empezó a ganar sus primeros campeonatos junior.
Empezó a dedicarse de lleno a la mecánica y el arte de pilotar, el joven Michael comenzó a pasear su talento por todos los circuitos que pudo y llegó hasta la Fórmula Ford y la F3 alemana. Su debut oficial en la categoría reina llegó en 1991, con un Jordan-Ford en el GP de Bélgica. Michael fue séptimo por tiempos pero no pudo dar ni una vuelta debido a problemas en el embrague. Esa fue su primera y última carrera con Jordan, porque Benetton enseguida lo fichó.
Es en Benneton, donde Schumacher empezó a escribir su leyenda. En 1992 hizo ocho podios, ganó su primera carrera y terminó tercero la temporada. El año siguiente fue cuarto. Y en 1994, tras la trágica muerte de Ayrton Senna, Michael se lanzó por el trono. En la última prueba ganó el Mundial después de enviar al muro a Damon Hill. Era su primer Campeonato de F-1. Título que revalidó al año siguiente antes de marcharse a Ferrari.
Michael armó un equipo y se ganó fama de perfeccionista. Fue tercero en el 96 y descalificado en el 97 después de hacerle otra jugarreta a Villeneuve. Incansable, volvió en 1998 con un Ferrari mejor pero otra vez en la última carrera se quedó a las puertas de la gloria. 1999 tampoco fue su año: Michael se fracturó la pierna y acabó quinto.
Pero con el 2000 todo cambió. Ganó las 3 primeras pruebas y administró esa renta ante los McLaren hasta conseguir su tercer título; el primero de Ferrari después de 21 años. Desde entonces Michael y Ferrari no se han movido del Olimpo. Arrasaron en 2001 batiendo todos los récords. Lo mismo que en 2002. Y otra vez en 2003 cuando " Michael Schumacher " superó, con seis títulos, al mítico piloto argentino Juan Manuel Fangio. Es el piloto más laureado de todos los tiempos, un ganador nato pero también un amante de la vida familiar que cuando no colecciona mundiales de Fórmula 1 disfruta jugando con sus dos hijos en su casa de Suiza.
Empezó a dedicarse de lleno a la mecánica y el arte de pilotar, el joven Michael comenzó a pasear su talento por todos los circuitos que pudo y llegó hasta la Fórmula Ford y la F3 alemana. Su debut oficial en la categoría reina llegó en 1991, con un Jordan-Ford en el GP de Bélgica. Michael fue séptimo por tiempos pero no pudo dar ni una vuelta debido a problemas en el embrague. Esa fue su primera y última carrera con Jordan, porque Benetton enseguida lo fichó.
Es en Benneton, donde Schumacher empezó a escribir su leyenda. En 1992 hizo ocho podios, ganó su primera carrera y terminó tercero la temporada. El año siguiente fue cuarto. Y en 1994, tras la trágica muerte de Ayrton Senna, Michael se lanzó por el trono. En la última prueba ganó el Mundial después de enviar al muro a Damon Hill. Era su primer Campeonato de F-1. Título que revalidó al año siguiente antes de marcharse a Ferrari.
Michael armó un equipo y se ganó fama de perfeccionista. Fue tercero en el 96 y descalificado en el 97 después de hacerle otra jugarreta a Villeneuve. Incansable, volvió en 1998 con un Ferrari mejor pero otra vez en la última carrera se quedó a las puertas de la gloria. 1999 tampoco fue su año: Michael se fracturó la pierna y acabó quinto.
Pero con el 2000 todo cambió. Ganó las 3 primeras pruebas y administró esa renta ante los McLaren hasta conseguir su tercer título; el primero de Ferrari después de 21 años. Desde entonces Michael y Ferrari no se han movido del Olimpo. Arrasaron en 2001 batiendo todos los récords. Lo mismo que en 2002. Y otra vez en 2003 cuando " Michael Schumacher " superó, con seis títulos, al mítico piloto argentino Juan Manuel Fangio. Es el piloto más laureado de todos los tiempos, un ganador nato pero también un amante de la vida familiar que cuando no colecciona mundiales de Fórmula 1 disfruta jugando con sus dos hijos en su casa de Suiza.
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